lunes, 16 de mayo de 2011

ÍDOLOS DEL VERDE


RENÉ HIGUITA

Arquero
Casi el Zeus del Olimpo verdolaga, todo nuevo ídolo que haga su ingreso al firmamento nacionalista debe sentarse a su diestra por haber sido el emblema y el símbolo del máximo logro del balompié de Atlético Nacional en su historia: La Copa Libertadores de América en 1989. Culpable de convertir a Nacional en el equipo más popular del fútbol colombiano, El Loco tendrá un lugar asegurado para siempre en el corazón de los verdolagas por haber tenido la osadía de ser original en un espacio tan pequeño como son los tres palos. Su recuerdo nutre la nostalgia y el hincha verde siempre hubiera querido que su arco, fuera defendido de forma perenne por el estelar portero que deleitó a todo el mundo a través de una originalidad suprema y una autenticidad que lo hizo ser amado en todos los rincones del planeta. Superhéroe disfrazado de verde.


FAUSTINO ASPRILLA

Delantero

Otro jugador proveniente del Cúcuta Deportivo gracias a una fabulosa actuación contra Nacional en el Atanasio donde bailó a Gildardo Gómez y que hizo que los directivos de la época posaran sus ojos sobre el diamante en bruto que había en la cancha. Llegó en 1990 como un desconocido y se fue en 1992 como la venta más importante del fútbol colombiano en la historia, llegando a ser luego en Europa el mejor futbolista colombiano de todos los tiempos.
Conformó con Víctor Aristizábal la dupla verdolaga más importante de la historia, fue campeón en 1991 con Nacional, integró muchas selecciones Colombia, estuvo entre los cinco mejores jugadores del planeta y es sin dudas un emblema del fútbol nacionalista.




VÍCTOR HUGO ARISTIZÁBAL

Delantero

Máximo goleador de la historia de Atlético Nacional con más de 200 goles en cuanta copa exista, salió de las divisiones menores con destino de leyenda. Ídolo de toda la afición antioqueña, el popular Aristi ha salido campeón con el cuadro verde en 4 oportunidades en 1991, 1994, 2005 y 2007, además de una Merconorte en 2000 que lo erigen como el más campeón de todos los tiempos en Colombia y uno de los que más vueltas ha dado con la institución.
Emblema de niños, insignia de grandes, bandera de todos, Aristi se ganó uno de los principales puestos en el corazón de los verdolagas por haber marcado tantos y tantos goles y por eso los hinchas lo elevaron al púlpito de los delanteros verdolagas de todos los tiempos.



ANDRÉS ESCOBAR

Defensa

Ídolo inmaculado de la afición verdolaga. Héroe perenne de los corazones verdes. Semidiós de la memoria colectiva de la afición nacionalista. Figura de la gran conquista de Nacional en su historia como fue la Libertadores de 1989, Andrés no solo colaboró con eso sino que fue parte del mejor equipo verdolaga de la historia cuando en compañía de sus amigos de Nacional y la Selección le demostraron al país, al continente y al mundo, que el meridiano del balompié también pasaba por Antioquia y Colombia. Su recuerdo nutre la nostalgia. Su calidad, su forma de ser, su don de gente, sus cambios de frente, sus cabezazos en ambas áreas, sus remates de fuera del área.
Su seguridad y su forma de jugar adentro de la cancha y de comportarse fuera de ella, le entregaron un sitial de privilegio en el mundo nacionalista que siempre lo tendrá como el principal héroe mimado de la colección de estrellas que posee el club. Nació y murió verdolaga. Suficiente para amarlo hasta la eternidad.


MAURICIO SERNA

Volantes de Marca

Ídolo perenne de la masa verdolaga, estandarte de tres títulos y bastión del mediocampo del mejor elenco colombiano de la década del 90. Algo que nunca se va a olvidar de Mauricio Chicho Serna, seguramente, fue su labor en varios puestos del club de Hernán Darío Gómez y Juan José Peláez: jugaba tan bien de delantero (hizo goles actuando en esa posición, como de volante creativo y destructor).
Hizo carrera dentro del club hasta marcharse hasta el cuadro de La Rivera (Boca Juniors) para ser más grande aún, y regresar a entregar más gloria al cuadro de sus amores. Un amor incondicional de la hinchada.

jueves, 7 de abril de 2011

ATLETICO NACIONAL

La Fundacion De Atletico Nacional

Cuenta el señor Carlos Serna, escritor antioqueño, que en 1947 Alberto Villegas Lopera, un ex presidente de la Liga Antioqueña de fútbol, lideró la fundación de una sociedad comercial destinada a estimular los deportes y establecer el fútbol y el baloncesto profesional en Antioquia. La sociedadinició labores con $50.000 aportados por 500 socios en acciones de $100 pesos cada una, pagaderas en un primer contado de $20 pesos al momento de ingresar a la sociedad y los $80 restantes en un máximo de 12 cuotas mensuales. Así pues, el viernes 7 de marzo de 1947 se consolidó el nacimiento de la nueva institución bajo el nombre de Club Atlético Municipal de Medellín. La escritura pública de la nueva sociedad se realizó el 30 de abril de 1947 en la notaría primera de Medellín. En 1950 se cambió el nombre por Atlético Nacional y desde allí siempre ha sido el mismo. El origen nacionalista, cuenta Serna en su libro sobre el elenco Verdolaga, viene de la fusión de dos equipos como Unión e Indulana que participaban con ruido en los torneos de la Liga de Fútbol de Antioquia de ese entonces, pero realmente el 30 de abril de 1947 está establecida como la fecha en que se comenzó esta linda historia.

Era un sueño ambicioso. Se trataba de convertir al Atlético Nacional en un equipo que hiciera honor a su nombre, integrado únicamente por jugadores colombianos. Un cuadro criollo protagonista del torneo colombiano y que poco a poco pudiera avanzar en el afianzamiento de un estilo propio que nos abriera amplios horizontes en el futuro. Hoy, medio siglo más tarde de su aparición, con el nombre de Atlético Municipal, vemos con satisfacción que buena parte de los objetivos se han cumplido. Sesenta años a lo largo de los cuales el equipo verde y blanco de Antioquia se ha consolidado como el verdadero símbolo del fútbol colombiano. Seis décadas llenas de logros y satisfacciones. Diez estrellas en el torneo de la Dimayor. La primera en el 54 cuando apenas se consolidaba el fútbol nuestro, superada la etapa del Dorado.